La terapia psicológica para adultos puede ayudarte con:
Gestión emocional
Nuestras emociones cumplen una importante función adaptativa y, una incorrecta gestión de las mismas puede tener repercusiones en nuestra vida. Ansiedad, angustia, miedos, inseguridad, estrés, tristeza, ira, desánimo… La gestión emocional abarca desde la capacidad de ser conscientes de aquello que sentimos, a la aceptación y regulación de las emociones en función del contexto y las circunstancias.
Afrontamiento
Existen determinados momentos en los que, por distintos motivos, podemos sentirnos confusos o bloqueados, incapaces de reaccionar. Muchas veces, aunque disponemos de las herramientas para hacer frente a dichas circunstancias, no somos conscientes de ello. La terapia es un recurso muy útil que puede ayudarte a potenciar tus estrategias de afrontamiento.
Autoestima
La autoestima forma parte del concepto que tenemos de nosotros mismos, es decir, es un conjunto de percepciones, pensamientos, sentimientos, etc., acerca de aquello que somos, tanto a nivel físico, como emocional y psicológico. Una buena autoestima es clave para una vida feliz, pues asienta las bases de nuestra propia confianza y del respeto hacia nosotros mismos.
Metas
La ausencia de metas o las dudas y vacilaciones a la hora de emprender nuestros proyectos, pueden provocarnos frustración y malestar. La terapia es un espacio en el que buscar en tu interior, encontrar y potenciar tus recursos y motivaciones, sincronizar pensamiento y emoción, cerebro y corazón, para lograr lo que anhela tu alma
Pensamientos negativos/obsesivos
Nuestros pensamientos afectan de forma directa tanto a nuestro comportamiento, como a nuestra forma de sentir. Los pensamientos negativos recurrentes y las obsesiones, pueden generarnos un gran malestar y afectar a todas las áreas de nuestra vida. Gestionarlos correctamente es posible con la ayuda adecuada.
Relaciones
Las relaciones con los demás constituyen una parte fundamental en la vida de toda persona, aunque en ocasiones aparecen dificultades, bien sea por falta de habilidades sociales o por otros motivos
Rendimiento
Nuestro rendimiento puede verse afectado en algún momento de nuestra vida, pudiendo causar problemas a nivel laboral o en nuestros estudios. La terapia puede ayudarte a identificar las causas que están manteniendo este problema para abordarlo de forma efectiva.
Apego
El apego constituye la base de nuestra seguridad, consuelo y protección, pero a veces, establecemos vínculos poco saludables que tienen consecuencias en nuestro bienestar. Un apego excesivo puede generarnos sufrimiento y, la terapia puede ayudarte a establecer relaciones más equilibradas.
Comunicación
Los problemas de comunicación nos generan inestabilidad y falta de entendimiento con las personas que nos rodean: amigos, familia, pareja, compañeros de piso o de trabajo, conocidos, etc. pudiendo terminar en conflictos y causándonos malestar.
